Puede suceder que si vas al volante te encuentres con un accidente de tráfico e incluso te veas involucrado en él. Los nervios y la inexperiencia pueden desorientarte. Por ello, la Dirección General de Tráfico nos da algunos consejos para saber cómo actuar en estos casos.
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Ante todo, mantén la calma. Nos nervios no harán más que impedir que actúes con claridad.
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En la medida de lo posible, detén el vehículo para dejar la vía despejada.
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Llama a emergencias facilitando toda la información posible: lugar, magnitud de siniestro, si hay fallecidos, etc.
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Si estás herido, no te muevas y espera a que lleguen los servicios sanitarios.
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En cambio, si resultas ileso, procura socorrer a las víctimas, manteniendo siempre la seguridad de la circulación.
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Procura no alterar el estado de las cosas de cara a futuras investigaciones.